Arjen Robben gana enteros para poder jugar el Clásico del sábado ante el Barcelona. El extremo holandés se entrenó este jueves con aparente normalidad junto al resto de sus compañeros, dando indicios de una asombrosa recuperación que puede permitirle estar a las órdenes de Juande cuando, tras su lesión ante el Getafe, se le daba por descartado.
Robben se lesionó el pasado 21 de abril ante el Getafe. El holandés, que entró como suplente en el descanso, apenas se mantuvo sobre el césped un cuarto de hora. Al día siguiente, se conoció el alcance exacto de su lesión -rotura fibrilar de grado I del tercio medio del tríceps sural de la pierna derecha- que, en prinicipio, le mantendría de dos a tres semanas de baja.
Sin embargo, MARCA adelantaba el 23 de abril que el propio futbolista no se descartaba para el duelo ante el Barça. El holandés ha seguido un plan intensivo de entrenamientos tanto con los fisios del club como en su propio domicilio. Todo ello ha dado sus frutos este jueves, cuando Robben ha podido trabajar con el grupo por segundo día consecutivo, aunque con un vendaje en la zona dañada. De todas formas, quedan más de 48 horas para el partido, y las previsiones sobre el concurso del holandés son bastante optimistas.
Dos novedades en el once
La novedad de Robben se une a la de Gabi Heinze, que podría entrar en el once como lateral izquierdo para cubrir la zona por la que suele entrar su compatriota Leo Messi. De esta forma, Marcelo subiría para actuar como interior zurdo, mientras que Robben entraría por la derecha, con Higuaín y Raúl en punta. Hay que recordar que Juande tiene las bajas seguras de Pepe y Sneijder y la casi confirmada de Guti.